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CORO.-
Estrofa 1ª.
¡Oh Tierra y resplandeciente rayo del Sol! ¡Contemplad, ved a
esta mujer funesta, antes de que arroje sobre sus hijos su mano
asesina, matadora de su propía carne! De tu áurea estirpe han
germinado,
y causa terror que l sangre de un dios sea vertida por hombres.
¡Detenía, oh luz nacida de Zeus, arroja de la casa a la desdichada y
asesina Erinis enviada por los dioses vengadores!
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Antistrofa 1ª.
En vano se ha destruido el esfuerzo por engendrar tus hijos; en
vano engendraste un linaje querido. ¡Oh tú que abandonaste la
azulada roca de las Simpiégades y el paso inhóspito! ¡Desdichada!
¿Por qué cae sobre ti la pesada cólera de tu alma y se transforma en
crimen hostil?
. Duras son para los mortales las manchas de sangre familiar
derramadas sobre la tierra, y dolores proporcionados a su culpa
hacen caer los dioses sobre las casas de los asesinos.
NIÑOS. — (Desde dentro.) ¡Ay, ay de mí! |
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CORIFEO.
Estrofa 2ª.
¿Lo oyes, oyes el grito de los niños? ¡Oh desventurada, oh infeliz
mujer!
NIÑOS.- (Desde dentro.)
—¡Ay de mí! ¿Qué hacer? ¿Adónde huir de las manos de mi madre?
—No lo sé, hermano queridísimo. Estamos perdidos.
CORIFEO.- ¿Debo entrar en la casa? Creo que hay que salvar a los
niños de la muerte.
NIÑOS.- (Desde dentro.)
—Sí, por los dioses, ‘salvadnos. Es el momento.
—¡Cuán cerca estamos ya del filo de la espada!
CORIFEO.- ¡Desdichada! ¡Es que eres como una roca o un hierro, |
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1290 |
para haberte
atrevido a matar con tu mano asesina el fruto de los hijos que
engendraste!
CORO.-
Antistrofa 2ª.
De una sola de una sola de las mujeres de antes tengo noticia que
dirigiera su mano contra sus propios hijos: ¡no, enloquecida por los
dioses, cuando la esposa de Zeus la expulsó de su casa, para que
anduviera errante.
Y ella, la desdichada, se lanzó al mar por el impío crimen de sus
hijos, precipitándose desde la costa marina, y murió arrastrando a
los dos hijos en su muerte. ¿Podría haber sucedido algo más
terrible? ¡Oh lecho de las mujeres, |
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rico en
sufrimientos, cuántos males habéis causado ya a los mortales! |
Cuenta la mitología que habiendo persuadido Ino a su esposo a acoger y
educar a Dioniso en su casa, ambos se volvieron locos por causa de la
enfurecida Hera, esposa de Zeus, ya que Dioniso era el fruto del amor
adúltero de Zeus con Sémele. Presa de esta locura, mató mo a su hijo
Melicertes y se arrojó con su cadáver al mar.